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Número 10, año 2020
Revista Catalana de Museologia

Editorial

Este año la Asociación de Museólogos de Cataluña celebra su vigesimoquinto aniversario.

Tengo la oportunidad de presidir la asociación en esta fecha tan importante, pero soy una pieza más de todo el engranaje que ha hecho y hace posible que la asociación haya llegado hasta aquí y que siga caminando.

Han sido varias las personas que han encabezado la asociación y muchas más formando parte de su junta.

A todas ellas transmito mi gratitud por la buena tarea realizada y por haber hecho posible llegar hasta hoy.

La asociación es compromiso con todo el abanico de profesionales de los museos, un compromiso con su trabajo y compromiso de país. Porque si las instituciones museísticas funcionan hoy es gracias en buena medida a la dedicación comprometida de todo su equipo humano.

La revista Mnemòsine nació hace dieciséis años como una iniciativa conjunta de la Asociación de Museólogos de Cataluña, presidida por Carles Marfà, y del Museo de Historia de Cataluña, dirigido por aquel entonces por Jaume Sobrequés i Callicó.

La intención era llenar el vacío bibliográfico existente de publicaciones especializadas en museología y museografía de carácter periódico de nuestro país. Para alcanzar este objetivo nos encomendamos a las divinidades mitológicas griegas, concretamente a Mnemósine (en griego antiguo Μνημοσύνη Mnēmosýnē, de μνήμη mnếmē, ‘memoria’), hija de Gea y Urano.

Y sin duda el objetivo se ha alcanzado. Adaptándose a los nuevos formatos digitales, la revista es el aparador de la asociación donde se recogen las reflexiones, investigaciones y actualizaciones del mundo de la museología.

Y también se ha llegado hasta aquí gracias a todo un equipo de asociados y asociadas que de modo altruista han dedicado tiempo y conocimiento para echar adelante la publicación desde su consejo de redacción. A todas estas personas colaboradoras les agradezco el esfuerzo y la dedicación.

A lo largo de estos años la revista ha estado inmersa en un proceso de evolución. De adaptación a las necesidades. Los cambios se han producido sobre una base sólida, que ha permitido encarar el futuro con optimismo.

Ahora el reto es llegar al cincuenteavo aniversario, y para ello seguirá existiendo un capital humano de primer nivel que lo hará posible, porque, como he dicho antes, el sector se nutre de profesionales con un gran compromiso con los museos y con el país. Y esta realidad es garantía de caminar veinticinco años más.

¡Muchas felicidades a todo el mundo!

Joan Vicens i Tarré

Presidente de l'Associació de Museòlegs de Catalunya